Sirve para tener una llama de fuego controlada, si lo aprietas podrá hacer una función similar a la de un soplete (obviamente no con la misma intensidad de uno jaja)
– Debes cuidar que el alcohol nunca se acabe cuando está en uso el mechero pues si te quedas sin alcohol, la mecha se empezara a quemar y te quedaras sin mecha
– La canica que lleva dentro ayuda a que tenga peso y estabilidad
Debes usarlo con alcohol 96%, igual puedes usar igual cualquier alcohol que sea mayor al 90%, si usas un alcohol de menor porcentaje, el fuego no encenderá o se apagara con mucha facilidad.
Esta herramienta es comúnmente utilizada en procedimientos de laboratorio dental y en algunos tratamientos específicos en el campo de la odontología.
Características del mechero de alcohol en odontología:
- Diseño: El mechero de alcohol en odontología está diseñado como un bote de plástico resistente y seguro. En la parte superior, tiene un orificio donde se inserta la mecha, que puede ser de algodón o fibra de vidrio, que se empapa con alcohol 96.
- Canica: En la base del mechero, se encuentra una pequeña canica de vidrio que actúa como un regulador del flujo de aire. Al encender el mechero, la canica se calienta y se eleva por el calor generado, lo que permite que el aire ingrese y mantenga la combustión constante del alcohol.
- Uso en odontología: El mechero de alcohol se utiliza para realizar diferentes tareas en odontología, como esterilizar instrumentos pequeños, calentar fórceps para extracciones, calentar instrumental para adaptar materiales, encender fuentes de luz o cápsulas de calor para activar cementos y materiales dentales, entre otros usos.
- Alcohol 96: Es importante utilizar alcohol de alta pureza, generalmente denominado alcohol 96 (o etanol al 96%), que es un alcohol medicinal con una concentración alta que permite una combustión más limpia y constante.
El mechero de alcohol en odontología es una herramienta simple y útil en el entorno clínico. Sin embargo, debido a la evolución de tecnologías más avanzadas y seguras, como los hornos de cerámica y los dispositivos de calentamiento eléctricos, el uso del mechero de alcohol se ha vuelto menos común en algunos aspectos de la odontología. A pesar de ello, sigue siendo una opción económica y práctica para ciertas aplicaciones donde se requiere una fuente de calor portátil y sencilla.
